...asistir a una proyección llena de estudiantes que han sido enviados a ella cual borregos, sin interés ni maneras, con ambiente más propio de un gallinero...
Fue un coñazo lo de ayer. El acta notarial de la proyección eriza a cualquiera: Una banda de chavales de 16 años del colegio X, la mayoría sin saber qué huevos pintaba ahí, viendo una peli de un tal James Benning, y todo entre la merienda que se trajo más de uno, consultas al móvil, charletas con los colegas, cambios de asiento y la madre que los parió.
Los tíos de la Casa Encendida deberían controlar el tema de pegarte la comilona padre durante la proyección. Es una falta de respeto para quien va a sentarse, joder, un poco tranquilo sin que le incordien más de la cuenta. Ayer, comiéndome un angelito de estos unos kikos en la oreja, pensé en estrangularlo. A él y a los de la Casa Encendida.
Pero reconozco que al final los chavales me cayeron simpáticos. Los cabrones apludieron a rabiar, ya para terminar de pitorrearse. Les entiendo: a esa edad te manda el enterado de tu profesor a ver lo que sea de JB, y sin tiros ni jacas del 15 en pantalla, pues coño, te dedicas a hacer el mono, está claro.
Me sumo al odio intenso. Es la idea de los museos: lo que quieren es público masificado. Los que tenía a mi lado se pasaron los santos planos mandándose mensajitos. Por no decir nada sobre su afición a sacar sus cabezas entre la luz y la proyección y dar una performance de cabezas chinescas Terrible.
Por cierto que LOS en la pantalla del Reina gano sobremanera. Si cuidaran mas el sonido todos ganariamos. Ni hablar de La Casa Encendida que a veces en Pat O'Neill los altavoces se veian saturados ante cualquier estridencia fuera de la norma.
10 comentarios:
Me da que fuiste al reina...
Pues no, fue en La Casa Encendida, con lo que era peor: sala pequeña de aprox.70 asientos, y un 90% eran esos estudiantes... ¿También ayer en el RS?
Fue un coñazo lo de ayer. El acta notarial de la proyección eriza a cualquiera:
Una banda de chavales de 16 años del colegio X, la mayoría sin saber qué huevos
pintaba ahí, viendo una peli de un tal James Benning, y todo entre la merienda
que se trajo más de uno, consultas al móvil, charletas con los colegas, cambios
de asiento y la madre que los parió.
Los tíos de la Casa Encendida deberían controlar el tema de pegarte la
comilona padre durante la proyección. Es una falta de respeto para quien
va a sentarse, joder, un poco tranquilo sin que le incordien más de la cuenta.
Ayer, comiéndome un angelito de estos unos kikos en la oreja, pensé en estrangularlo.
A él y a los de la Casa Encendida.
Pero reconozco que al final los chavales me cayeron simpáticos. Los cabrones apludieron
a rabiar, ya para terminar de pitorrearse. Les entiendo: a esa edad te manda el enterado
de tu profesor a ver lo que sea de JB, y sin tiros ni jacas del 15 en pantalla, pues coño,
te dedicas a hacer el mono, está claro.
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Me sumo al odio intenso.
Es la idea de los museos: lo que quieren es público masificado.
Los que tenía a mi lado se pasaron los santos planos mandándose mensajitos.
Por no decir nada sobre su afición a sacar sus cabezas entre la luz y la proyección y dar una performance de cabezas chinescas
Terrible.
Desde luego fue una sesión bastante experimental.
Hola, Pablo
Creo que te reconocí ayer en LCE. Te iba a saludar a la salida, pero la 'marabunta' me lo impidió...
pues ya nos veremos en otro sarao.
Sin colegio benningiano por medio.
Anger en la Tate y el Reina mostrando DVD-R
http://www.tate.org.uk/modern/eventseducation/film/20958.htm
Por cierto que LOS en la pantalla del Reina gano sobremanera. Si cuidaran mas el sonido todos ganariamos. Ni hablar de La Casa Encendida que a veces en Pat O'Neill los altavoces se veian saturados ante cualquier estridencia fuera de la norma.
Los letristas invitarian a los chavales a sus proyecciones...
Sólo si hubiesen pasado algo monumental, tipo "Intolerancia", de Griffith, o cualquiera en la que asomase John Wayne. Pero jamás en la de Benning.
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